En el escenario inmobiliario actual, la tarea de encontrar una vivienda adecuada, a un precio razonable, se ha convertido en un desafío considerable para un importante número de personas. Este proceso no se limita únicamente a la selección de un espacio físico, sino que también implica la toma de decisiones financieras que tendrán un impacto directo en la calidad de vida del inquilino.