La adquisición de una vivienda es una de las decisiones financieras más importantes que la mayoría de las personas tomarán en su vida. Si bien es innegable que factores como el precio, la ubicación y las características físicas de una propiedad desempeñan un papel importante en esta elección, lo que a menudo pasa desapercibido es la poderosa influencia de la psicología en este proceso de toma de decisiones.